Hoy vengo a hablaros de la favorita de muchos: La tarta de queso. Si, ese postre cremoso y delicioso que a todos les entra fácilmente después de una buena comida. Para mí, la tarta de queso es el comodín perfecto para cualquier ocasión. ¡Triunfa allá donde va!
Un Poco de Historia
¿Sabías que el primer registro de la tarta de queso se remonta a la Antigua Grecia?
Efectivamente, se dice que los atletas, ya en los primeros Juegos Olímpicos consumían una mezcla de queso y miel para obtener energía antes de competir.
Luego, durante la expansión del Imperio Romano, estos adaptaron la receta e hicieron su propia versión, añadiendo huevos y horneando la mezcla.
Este postre ya se parecía más a lo que conocemos hoy en día.
Gracias a los romanos la receta se extendió por diferentes partes de Europa y, más tarde, a América.
En Nueva York surgió la famosa New York CheeseCake y cuando, en el año 1872, William Lawrence inventó el queso crema, la tarta de queso adquirió su textura cremosa y suave que la caracteriza hoy en día.
Amor en Cada Bocado
Para mí, hacer una tarta de queso, del tipo que sea, no es solo preparar un postre; es un acto de amor. Cada vez que la preparo, pienso en las personas que van a celebrar la vida, en las risas y las conversaciones que irán acompañadas de cada bocado.
Máxima Versatilidad
¡Lo más divertido de la tarta de queso es su versatilidad! Puede ser tan sencilla como la clásica New York Cheesecake, con su textura densa y su sabor inconfundible, hasta versiones más exóticas con frutas, chocolates o dulce de leche. Esta es una tarta que a mí me encanta, tanto que, en mi tienda ¡podrás encontrar cinco tipos de tartas de queso!
¿Y a vosotras, cuál es vuestra versión favorita de la tarta de queso? ¡Contádmelo en los comentarios!
Mis favoritas
Otra cosa que me encanta de la tarta de queso es que no se hace repetitiva. Hay tantas posibilidades de hacerla y comerla, que nunca te cansarás de ella. ¡Aquí te cuento mis tipos de tarta de queso favoritos!
- Tradicional: la de toda la vida, estilo Mamayiya. Muy jugosa y ligera.
- Frutos Rojos: Fresas, frambuesas, arándanos… cualquier fruto rojo aporta un contraste ácido que resalta la cremosidad de la tarta. ¡Está de rechupete!
- Tiramisú: Combina la tarta de queso con el sabor y la galleta del tiramisú. Sorprendente y dulce combinación.
- Chocolate: Tarta de queso con crema de avellanas y chocolate. Sencillamente espectacular.
- Dulce de leche: tiene un toque inigualable, un sabor dulce y caramelizado. Sin duda, el juego de contrastes perfecto.
¡Pide la tuya!
Si se te ha antojado una tarta de queso, no dudes en visitar mi web, verás todas mis tartas y seguro que alguna te entra por los ojos. ¡No te arrepentirás! Recuerda que si tienes alguna duda puedes escribirme por Instagram o WhatsApp y ¡estaré encantada de charlar contigo!
Si quieres pedir tu tarta de queso personalizada, te invito a leer otro artículo en el que hablo de formas originales para personalizar tu tarta. ¡Te va a encantar!
¡Nos leemos en el próximo blog!
Un besito de tarta de queso 💋🌸
